Vértigo y Mareo. Clínica Especialista.

Vértigo y Mareo. Clínica Especialista.
www.vertigoymareo.com

Vértigo Postural Paroxístico Benigno, y la tortura de las piedritas sueltas en el oído interno.

El Vértigo Postural Paroxístico Benigno es la enfermedad mas frecuente relacionados con vértigo y la que a mi parecer tiene el nombre mas complejo, y por supuesto de los mas difíciles de recordar… de tal suerte que generalmente se le conoce como “El Vértigo”.

Dentro de los síntomas principales incluye:

• Ataques de Vértigo (sensación de que uno gira ó todo está girando), de "corta duración" (entrecomillamos esto ultimo ya que el paciente suele sentir que dura mucho mas).

• Nauseas.

• Vómito en ocasiones

• Sudoración.

• Sensación de inestabilidad y mareo residual (posterior a crisis de vértigo).

• E incluso ansiedad y miedo importante. 

Lo curioso, y una parte fundamental de esta enfermedad es que los síntomas se desencadenan por cambios de posición de la cabeza, en su mayoría en situaciones que involucran recostarse o levantarse/sentarse en la cama, girarse en la cama, agacharse, extender la cabeza para ver hacia arriba.

Ahora bien, “El Vértigo” (alias Vértigo Postural Paroxístico Benigno) es causado por la malposición de unas "piedras" en una estructura que se llama oído interno, sin embargo para explicar ésto es necesario hacer un brevísimo y espero no muy aburrido recordatorio de anatomía y fisiología:

El sitio del oído interno que se “encarga del equilibrio” se llama Vestíbulo, y éste se compone de 3 canales semicirculares, que son estructuras cilíndricas "huecas por dentro" con liquido en su interior (que en éste caso se le conoce como endolinfa)  y un receptor del movimiento al final de cada uno de ellos; entonces, cuando nosotros movemos la cabeza, el liquido del canal del se mueve, lo que va a estimular el sensor de movimiento previamente descrito, el cual a su vez le envía al cerebro la señal de que hemos movido la cabeza hacia alguna dirección. En general estos canales se encargan de percibir cuando hacemos movimientos giratorios o movimientos angulares como decimos en medicina (ej. cuando uno gira la cabeza a un lado u otro). 

Existen muy cerca de esos semicírculos 2 órganos adicionales (también llamados órganos otolíticos), que podríamos decir que son “bolsas” llenas de una especie de gelatina en donde se encuentran reposando unas partículas llamadas otolitos (las famosas “piedritas”, que dicho sea de paso, están formadas de un material llamado oxalato de calcio) las cuales le dan peso la gelatina; entonces podríamos decir que éstas estructuras nos dan información de como tenemos la cabeza en cuanto a la fuerza de gravedad (o sea si estamos verticales u horizontales) y se describen como sensores de movimiento lineal (que se encargan de percibir desplazamientos verticales u horizontales). 

Dicho esto, y como comentábamos previamente, hay ocasiones en que las piedritas (u otolitos) se salen de las bolsas a las que corresponden, y se meten a uno de los canales semicirculares que describimos con anterioridad, causando que cada vez que el paciente se acuesta en la cama, o se levanta o se gira, estas piedras se desplazaran dentro del canal, lo que va a provocar una hiper-estimulación del sensor de movimiento de dicho canal, lo que generará la sensación de que las cosas empiezan a dar de vueltas (incluso algunos pacientes los refieren como si se estuvieran yendo por el caño). Esa sensación suele durar el tiempo que tardan en deplazarse los otolitos (mas o menos como cuando en agitamos una bola de cristal de esas que tienen como nieve adentro, y las partículas empiezan a caer lentamente). Posteriormente, como cualquiera de nosotros al ser lanzados por un caño, el paciente se queda una sensación residual de inestabilidad y mareo… hasta el próximo movimiento de cabeza que desencadene El Vértigo. 

Ahora bien, la mayoría de las veces ocurre en las mañanas (aunque no es una regla) pues en la noche suele ser el momento en que los otolitos que hayan perdido adherencia a la gelatina se van a salir lentamente de la bolsa y se irán introduciendo al canal, y poco a poco se van amontonando hasta formar un cumulo de piedras o una masa de mayor tamaño, de tal forma que cuando el paciente se despierta y realiza alguno de los movimientos previamente descritos, desencadenando vértigo.  

Una pregunta importante suele ser ¿Cual es la causa de ésta enfermedad?. La respuesta en general es "no sabemos" (lo siento, no sabemos todo aún). Aunque hay varios factores de riesgo descritos, como tener arriba de 40 años, ser mujer, tener una enfermedad previa del oído interno (ej. neuritisenfermedad de Méniere, etc.), y recientemente se esta hablando mucho de la posible relación de ésta patología con deficiencias de Vitamina D y Calcio, aunque aun hace falta hacer mas investigación al respecto. 

Para realizar el diagnóstico casi siempre es suficiente con la historia clínica y una exploración física que forzosamente debe incluir maniobras posturales diseñadas para desplazar las partículas en los canales semicirculares (Dix-Hallpike, Roll test, etc.), mismas que desencadenarán vértigo, pero más importante aun, desencadenaran un movimiento ocular característico (llamado nistagmo), el cual dependiendo de la dirección y características del movimiento, nos dará el diagnóstico, por lo que es raro que sean necesario indicar estudios adicionales. 

En cuanto al tratamiento, podríamos decir que tenemos dos opciones. Una es dejar que las partículas se vayan disolviendo solas en el liquido donde se encuentran (imaginemos que dichas partículas son cristales de azúcar embebidos en un medio liquido), por lo que tarde o temprano se disolverán solas (éste proceso puede tardar desde algunos días, hasta varios meses). Otra alternativa (y la MÁS recomendada) es realizar maniobras diseñadas para regresar las partículas hacia donde pertenecen, ya que dicho tratamiento suele durar 10 minutos aproximadamente, teniendo una eficacia de entre el 80% al 90% en la primer maniobra (ej. maniobra reposicionadora de Epley). Existen otras maniobras diseñadas para que el paciente haga unos ejercicios en su casa, los cuales están diseñados para disolver las partículas un poco mas rápido de lo que lo harían normalmente (Maniobra de Brandt-Daroff) sin embargo ésta ultima alternativa suele ser mucho más lenta que las maniobras reposicionadoras, y en algunos pacientes pudieran ser menos toleradas. 

El tratamiento farmacológico en estos casos suele ser necesario únicamente como tratamiento sintomático, o sea, para disminuir la intensidad de los síntomas (lo que podría ser un analgésico para un dolor de cabeza), pero difícilmente algún medicamento va a alterar la historia natural de la enfermedad. Dentro de los medicamentos que se pueden utilizar existen los llamados frenadores laberínticos y antieméticos (como difenidol), ansiolíticos e incluso medicamentos procinéticos. 

Entonces, como conclusión, es una enfermedad que si bien suele ser muy sintomática y molesta, también es de las enfermedades relacionados con vértigo mas tratable y con mejores resultados eligiendo adecuadamente el tratamiento. 

3 comentarios :

  1. Muchas gracias Doctor por compartir está información, mi Padre ayer en la tarde estuvo con usted, precisamente x este motivo y al parecer va muy bien sin vértigo. Un fuerte abrazo, Dios lo bendiga.

    ResponderBorrar
  2. Dr. Oscar Dorado.
    agradezco su atención del día de hoy en consulta,
    seguiré sus indicaciones y estaré en contacto molestándolo. muchas gracias.

    ResponderBorrar